Santa Lydwina (o también Ludivina) nació en Schiedam en 1380 y murió en 1433. De joven sufrió un accidente en el hielo, lo que fue deteriorando su salud por el resto de su vida. Entregó su sufrimiento a Dios y con virtuosa paciencia soportó todas las contrariedades de su vida.
Llamada «una víctima del Corazón de Jesús» fue canonizada en 1890 por el Papa León XIII y en 1944 fue nombrada «Santa Patrona de los Patinadores»; es además invocada como protectora frente a las enfermedades crónicas.
Oración: «Santa Lydwina, alcánzanos de Dios la gracia de aceptar con paciencia nuestros sufrimientos como pago por nuestros pecados y para conseguir la conversión y salvación de muchos pecadores. Amén».
Una réplica de su imagen será bendecida una vez finalizada la misa de Catedral de 11 horas del próximo domingo 24 de abril.