Por Emilio Grande (h.).- Hace unos días la Federación de Colegios de Abogacía de la provincia de Santa Fe emitió un duro documento sobre las falencias existentes en los tribunales santafesinos agravadas por la extensa cuarentena.
Al respecto, el presidente del Colegio de Abogados de Rafaela Enrique Soffietti opinó que “la Federación se formó de una forma plural y que no exista una comisión directiva para ser representada por los 5 colegios. Una de las cosas que ayudó esta situación de pandemia fue para fortalecer los lazos entre los pares, trabajemos con criterios unificados y surgió la posibilidad de hacer una Federación”, durante en el programa “Sábado 100” por radio El Espectador (FM 100,1), conducido por quien firma esta entrevista.
-¿Por qué la Justicia provincial marcha sin rumbos y cuáles son las falencias más notorias?
-El comunicado es el reflejo de lo que venimos manifestando desde el 18 de marzo. Faltó un plan o imaginarse cómo trabajar en situaciones como ésta, que obliguen a no seguir trabajando con las estructuras tradicionales: el papel y los formatos que veníamos trabajando hasta ahora. Hay proyectos de reformas de los códigos procesales civiles; la justicia penal ya tuvo su modernización siguió trabajando con audiencias virtuales a un ritmo bastante aceptable. Los abogados nos vemos muy afectados con el nuevo sistema de tramitación de causas, fundamentalmente en lo civil, porque el sistema informático que está usando la Corte es caduco y con parches porque no está a la altura de las circunstancias. Los abogados tuvimos que empezar a utilizar medios electrónicos y nos hubiera gustado tener un tiempo de adaptación. Hay otra cuestión que es la falta de diálogo y siempre pedimos reunirnos; los jueces y secretarios fueron bastante colaborativos, pero lo ideal sería sentarnos con los integrantes de la Corte para unificar determinadas cuestiones. El problema es cuando presentas un escrito y te dicen “no porque el papel no corre más”, existiendo un código prácticamente por cada juzgado. Si bien nos embroman a nosotros porque no podemos generar nuestros ingresos, el que termina pagando las consecuencias es la gente, evitando presentar un juicio porque no se sabe cuándo empieza y cuándo termina, no sabe si se podrá hacer la audiencia pre-judicial, adónde se hace, cómo se hace, si son más de 5 no hay lugar; si me dan un turno para firmar un poder que lo voy a tener dentro de un mes, para certificar una copia dentro de 45 días o publicar un edicto dentro de 2 meses. La cuarentena en la ciudad es muy laxa y, por otro lado, tenemos restricciones para operar en algo que es un servicio público de justicia, es más que una actividad esencial y es fundamental.
-Siempre hay vacantes en los juzgados provinciales, ¿cuáles son los que más urgen en la Justicia local y departamental?
-El Colegio de la V Circunscripción abarca los departamentos Castellanos, San Cristóbal y 9 de Julio. Donde es más necesario son los juzgados comunitarios, lo que eran antes comunales, adónde faltan entre 24 y 25 vacantes, siendo lugares sensibles Ataliva, Humberto, Tacural; en Vila hace 10 años que no hay juez. Tenemos que sentarnos a discutir si es necesario poner un juez o una oficina del Registro Civil que le dé una mano al juez. En Rafaela el Juzgado de Civil y Comercial de Distrito Nº 1 de 1ª instancia está vacante hace 3 o 4 años, ese es fundamental, pero tenemos la buena noticia que en los próximos días se abre el concurso para los camaristas civiles; en Rafaela crearon una cámara nueva, se va a cubrir la nueva sala de la Cámara Civil, el camarista civil que falta y la vacante de Civil Nº 1. También está creado el Juzgado de Distrito en Sunchales, peor no tiene asignado presupuesto. La Corte recibirá a la Federación de Abogados de la Provincia este martes al mediodía.
-Entonces, ¿también hay buenas noticias?
-La buena noticia es que hay buena gente, la mayoría es buena más allá de que en Derecho hay un principio que dice que “la buena fe se presume”. Acá la buena fe existe y siempre, pero muchas veces por miedo se ponen trabas. En este tiempo siempre nos encontramos con buena gente dentro del Poder Judicial, entre los abogados y en la comunidad, quienes hicieron que esto no estalle porque estuvo muy cerca de estallar. Hay abogados que están muy mal y el golpe económico se va a sentir de acá en adelante porque siempre se dice que es una cadena, pero se dejó de unir eslabones hace 4 meses y tiene que volver a arrancar como para tener los frutos. En el caso de que tengamos un positivo (de coronavirus) en la comunidad no volvamos a cerrar las puestas de la Justicia.
-¿Cómo analizas técnicamente la extensa cuarentena respecto a las libertades individuales y las garantías constitucionales sobre los DNU del Presidente?
-Los DNU están contemplados en la Constitución Nacional para cuestiones de emergencia, pero que el Congreso no los discuta para ratificarlos o no es un problema de las instituciones. Argentina tiene un conjunto de leyes maravillosas, quizás no estamos capacitados para usarlas como queremos. Quienes crearon el plexo normativo argentino son ejemplo en el mundo. Respecto a las libertades hay una cuestión no solamente legal sino filosófica. La Constitución es liberal en el sentido de Derecho y en cuanto que respeta las libertades, con la reforma de 1994 es de avanzada, y tenemos un Código Civil y Comercial de lujo. Soy un defensor a ultranza de la libertad de las personas, pero nuestra libertad no puede embromar la vida, la salud o el patrimonio de nuestros vecinos.
“Tenemos restricciones para operar en el servicio público de justicia”
Es la mirada Enrique Soffietti, presidente del Colegio de Abogados de Rafaela y miembro de la Federación de Colegios de Abogacía de Santa Fe. Pidió mayor diálogo con la Corte y la Federación fue recibida donde se plantearon problemas de funcionamiento, especialmente en materia civil. Se abre el concurso para la nueva sala de la Cámara Civil, el camarista civil que falta y la vacante del Juzgado Civil Nº 1.