Por Emilio Grande (h.).- En la sala de sesiones del cuerpo legislativo, algunos concejales recibieron este martes a la tardecita-noche a un grupo de 6 madres de la escuela primaria Rivadavia, quienes plantearon el viejo problema para ingresar a primer año en determinados establecimientos secundarios de nuestra ciudad.
“No entraron en la ex Nacional y en la Técnica 460, fueron a un sorteo en noviembre, que es violento… tuvieron que sacar un número y quedaron afuera. Mi hijo quedó afuera en la Técnica; es difícil y triste”, fue una de las exposiciones escuchadas durante el encuentro.
Mencionaron que además de las escuelas Nacional y Técnica con problemas de bancos está también la ex Normal. Estimaron que son casi 300 chicos en esta situación de quedar sin banco. Los ediles Lisandro Mársico (presidente del cuerpo), Carla Boidi, Mabel Fossatti y Paz Caruso escucharon el rosario de reclamos, quienes harán gestiones ministeriales.
“La ciudad tiene lugares para todos, pero lo que tu hijo te pide no se puede concretar; mi hijo fue abanderado y con buen comportamiento, también quedó afuera. No se incentiva el esfuerzo”, fue otra de las voces que resonaron en el sexto piso.
Previamente, contaron que hicieron algunas gestiones: “Nos contactamos con la Regional (III de Educación), donde elevamos una nota, que también fue enviada al Ministerio de Educación, nos recibió una supervisora y se hizo un expediente. Lo hacemos por nuestros hijos. Mi hija quería el Nacional por la terminalidad biológica; como quedó afuera le tocó la escuela Malvinas Argentinas. En la Rural se hizo la Expo Rural con los perfiles de cada escuela secundaria”, destacó.
Otro de los testimonios fue no caer en la resignación: “No podemos creer que no se pueda cambiar esta situación, que sea totalmente azaroso el ingreso a la escuela, la exigencia de la primaria no sirve; si estudias vas a una bolsa de azar, me niego a este sistema. Al que repite se le asegura el banco. Me niego a pensar que esta sea la solución. Nadie tiene que permitirlo, tendrá soluciones a mediano o largo plazo. Va en contra del espíritu de la ciudad”, se quejó otra madre, oriunda de Corrientes, radicada en Susana.
En el caso de la Nacional, “solicitamos que pongan cursos en el turno tarde, donde por ahora hay un solo. Podrían agregarse algunos cursos más porque tiene espacio físico, pero faltarían los recursos humanos”.
A título de ejemplo, dijeron que en Buenos Aires se rinde un examen de ingreso en el Colegio Pellegrini.
Mirada legislativa
Durante el intercambio del diálogo, Mársico aclaró que “somos conscientes de lo que pasa, no es la primera vez que ocurre esto. Hay que llevar el reclamo a quienes son los responsables para darle una solución; es desesperante por lo que escuchamos. El Gobierno anterior no le interesó resolver el problema, pero el actual está llevando medidas”, para preguntar en voz alta: “¿Cuántos bancos quedan libres para el sorteo? ¿Existe este problema en otras ciudades de la provincia? En mi época, en el Nacional se compartían las aulas con la Comercio”.
Mabel Fossatti (ex docente y ex directora de escuelas primarias Villa Podio y Mitre) aclaró que “está reglado por una resolución ministerial del 2009, donde se pueden hacer evaluaciones y diagnósticos, y el sorteo dentro del calendario escolar, según las directivas que se baja desde el Ministerio”.
Aprovechó para leer lo normado sobre las prioridades para inscribir a los aspirantes: alumnos de la primaria que funciona articuladamente y en el mismo edificio de la secundaria, con lazos de parentesco con el personal, hermanos de alumnos pertenecientes al establecimiento. No se podrán implementar pruebas de ingreso para seleccionar a los alumnos y se podrá tomar evaluaciones diagnósticas para utilizar los datos para la planificación anual.
“Faltan escuelas secundarias, solamente hay una al oeste de la ruta 34 en el barrio Malvinas. La escuela tiene la obligación de guardar el lugar a los repitentes”, graficó Fossati.
Paz Caruso preguntó: “habría que estudiar ¿cuáles son las terminalidades más demandadas en la ciudad?”
Carla Boidi aportó que “hubo una iniciativa para priorizar a los mejores promedios, pero también hay un problema edilicio”.
A decir verdad, es un viejo problema que se repite desde hace muchos años en algunos establecimientos educativos locales, no teniendo directivas del Ministerio de Educación provincial para fijar criterios de ingreso, en base a un examen o mejores promedios de la escuela primaria, teniendo inexplicablemente prioridad los repitentes, quienes tienen asegurado su banco frente a los abanderados que tuvieron excelentes notas…