Por Alejandro Damianovich.- En un artículo anterior me referí al panorama historiográfico argentino de la década de 1930, el que sirvió de marco al nacimiento de la Junta Provincial de Estudios Históricos, fundada como Centro de Estudios Históricos hace noventa años. En este, me propongo resaltar la importancia del surgimiento de este núcleo de estudiosos que iniciaron en Santa Fe un recorrido académico -paralelo a la Universidad, aunque se establecieran con ella vasos comunicantes-, que llega hasta nuestros días en forma ininterrumpida.
Existían con anterioridad algunos espacios, como el Archivo Histórico, desde donde se promocionaba la investigación, o la Facultad de Derecho de la UNL, que incluía trabajos de temática histórica entre sus publicaciones. También reconocidos historiadores que habían producido obras de envergadura sobre la historia de Santa Fe, como Juan Álvarez en Rosario o Manuel M. Cervera en Santa Fe capital.
Los inicios
Fue precisamente Manuel M. Cervera quien decidió crear en el modesto medio intelectual santafesino de la década de 1930, un centro de estudios históricos que dialogara con los progresos que se notaban en la materia a impulsos de la «nueva escuela histórica argentina», promovida desde los ámbitos universitarios de Buenos Aires y La Plata. Con 72 años, poseedor de un capital científico relevante desde que escribió su «Historia de la ciudad y provincia de Santa Fe» (aparecida en 1907), Cervera se puso manos a la obra y reunió un primer núcleo de historiadores locales de variado perfil: Félix Barreto, Clementino Paredes, José María Funes, Ángel Caballero Martín y Salvador Dana Montaño. La reunión fundacional tuvo lugar en la sede de los «Tribunales Viejos», actual Escuela Provincial de Bellas Artes.
Era el 8 de junio de 1935, cuando nacía el Centro de Estudios Históricos que pronto adoptaría el nombre de Junta Provincial, al ser declarada en 1942 por el gobierno como «ente asesor de los estudios que le son propios». Por entonces ya había iniciado la publicación de su revista especializada, que lleva al presente 75 entregas, y había organizado en 1938 unas Jornadas de Historia de importante convocatoria académica con motivo del centenario de la muerte de Estanislao López (cuyas ponencias y aportes documentales se dieron a conocer en dos tomos). Otra reunión de similares perfiles tuvo lugar en 1943, con motivo de los noventa años de la Constitución Nacional.
Nueve décadas de estudio e investigación
A la presidencia de Cervera se sucedieron las de monseñor Nicolás Fasolino, Leoncio Gianello, José María Funes, Federico Guillermo Cervera, J. Catalina Pistone, Bernardo Alemán, Leo W. Hillar Puxeddu, Felipe Justo Cervera, Ana María Cecchini de Dallo, Guido A. Tourn y quien esto escribe. A lo largo de nueve décadas la entidad fue creciendo y proyectándose a nivel nacional por medio de su revista, de la incorporación de miembros prestigiosos numerarios y correspondientes, de la disponibilidad de una sede de alto valor patrimonial -el Monumento Histórico Nacional «Casa de los Aldao»-, de la conformación de una biblioteca especializada de más de 15.000 volúmenes, de la periódica realización de los Encuentros de Historiadores (diez ediciones entre 1992 y 2022), del asesoramiento a los poderes del Estado y a particulares, de la labor editorial que viene sumando libros conmemorativos de los bicentenarios, así como de la constante presencia en la prensa escrita, especialmente en las páginas de El Litoral de Santa Fe (a lo que se suma la creciente actividad en las modernas redes sociales de nuestro tiempo).
Entre algunas de las ediciones que produjo la entidad figuran la publicación de las Actas Capitulares de los siglos XVI y XVII, los «Apuntes para servir a la historia de Santa Fe» de Urbano de Iriondo, la esmerada edición sobre «Santa Fe en la gestación y desarrollo de la Argentina» (2014) y de las obras dedicadas a los bicentenarios del nacimiento de Estanislao López (1986), de la autonomía provincial (2015), de la independencia nacional (2016), del ascenso al gobierno de Estanislao López (2018), del Estatuto Provisorio de 1819 (2019) y del fallecimiento de Manuel Belgrano (2020).
Dentro de esa historia, fue 1975 un año de especial importancia para la Junta. Por un lado porque fallece José María Funes, uno de los fundadores (en ejercicio de la presidencia); por otro, porque se recibe de la Nación la «Casa de los Aldao» para que sirva de sede, siendo que había sido declarada Monumento Histórico Nacional en 1942. También fue en 1975 que llegó a la institución Catalina Pistone, la primera de una larga lista de destacadas investigadoras y primera presidenta de la entidad desde 1989 hasta su fallecimiento en mayo de 2000. En la actualidad veinte historiadoras comparten el elenco de la Junta con veinte miembros masculinos. Sus cuarenta miembros se reparten especialmente entre Santa Fe y Rosario, pero los hay también en Rafaela, San Lorenzo, Gálvez, Alejandra y Reconquista.
Custodia de un patrimonio histórico
Una especial mención merece el rol y la responsabilidad de la Junta como custodia del Monumento Histórico Nacional «Casa de los Aldao», ya que la institución ha gestionado periódicas intervenciones para su conservación, restauración y puesta en valor, como ocurrió en 2011, 2013 y en 2022, habiéndose finalizado las obras de la última intervención en septiembre de 2023.
Como ente asesor de los poderes del Estado, aun cuando su estatus legal es el de una asociación civil, la Junta recibe el apoyo oficial, conforme al Decreto N° 5965 del 16 de junio de 1942 y la Ley Nº 9340 de 1983. De esta forma puede abrir al público el Monumento Histórico y a la consulta su importante biblioteca, como así también su selecto archivo que cuenta, entre otras colecciones, con los papeles privados de Francisco Antonio Candioti o las actas y documentos referidos a los orígenes del radicalismo en Santa Fe y la revolución de 1893.
Por su propio peso y por la trayectoria de sus miembros, la Junta se vincula a otras entidades afines de la provincia. Varios de sus integrantes fueron directores del Archivo General de la Provincia (F. Barreto, J. M. Funes, A. Roverano, J. C. Pistone, A. M. Cecchini y L. Montenegro), o del Departamento de Estudios Etnográficos y Coloniales (A. Zapata Gollán, L. M. Calvo, G. Cocco). Participó también de la comisión fundadora del Museo Histórico que presidió J. M. Funes en 1940 y dirigió en otra época L. W. Hillar, y varios de sus miembros fueron docentes o directivos de la extinta Facultad de Historia de la Universidad Católica de Santa Fe o del Instituto de Historia de la UCA de Rosario, como también de las Facultades de Humanidades de la UNL y UNR. Hay entre sus integrantes quienes actúan o actuaron como investigadores en el Conicet o son académicos nacionales de número o correspondientes.
Por su antigüedad, la Junta de Santa Fe ocupa el segundo lugar en el país, después de la de Mendoza, encontrándose avocada a sus labores académicas y proyectos, como la realización del próximo XI Encuentro de Historiadores «90º Aniversario» a realizarse en esta capital el 22 de agosto de 2025 y la presentación del número 76 de su revista especializada, el que se encuentra actualmente en la imprenta.
Fuente: https://www.ellitoral.com/