Por María Inés Adorni.- Es fundamental para la felicidad conectarse con uno mismo. La sabiduría nos ayuda a tomar mejores decisiones, tener una mayor paz mental.
Antes nuestros abuelos no necesitaban meditar porque realmente ellos descansaban mucho y trabajaban en los campos y en silencio. Ellos comprendían que había que irse a dormir temprano cuando ya bajaba el sol cenaban antes y a la cama. No había problemas del sueño, la hormona melatonina solo hacía su trabajo como todo cuerpo sabio. Esa hormona inducía el sueño. Los viejos de antes eran super sabios.
Ahora en esta realidad por culpa de nuestro sistema, los seres humanos ya parecemos máquinas. Reloj para despertarnos, para irnos a dormir. Pero si seguimos el reloj de nuestro cuerpo de irnos a dormir… es por las redes de internet que ya ni nos conectamos con nosotros mismos y la naturaleza.
Al cultivar la sabiduría interior se puede lograr una mayor paz mental, una mayor gestión emocional y una conexión más profunda con el propósito personal, lo que conduce a una mayor satisfacción y felicidad en nuestras vidas. Mayor comprensión de uno mismo, gestión emocional, paz mental, propósito y significado, relaciones saludables.
La autoconciencia nos sirve para reflexionar de nuestras propias experiencias tanto positivas como negativas, pueden ser valiosas lecciones que nos ayudan a crecer y a desarrollar nuestra sabiduría.
Tenemos que ser mas amables con nosotros mismos, la autocompasión y aceptación nos ayudan a liberarnos del sistema. Tenemos que buscar el significado y propósito de vida, y contribuir a algo más grande que nos aumente nuestra sensación de felicidad y plenitud.
Al cultivar la sabiduría interior podemos crear una vida más plena, satisfactoria y feliz. Volvamos a la fuente que es Dios en nuestro corazón, volvamos a imitar a nuestros viejos y nuestros abuelos.