Por Emilio Grande (h.).- La diócesis de Rafaela también se unió espiritualmente en oración por el fallecimiento del papa Francisco (1936-2025) con una misa, encomendando su alma a Dios y en acción de gracias por vida entregada a la Iglesia y al mundo, en el marco de la octava de Pascua.
La ceremonia fue oficiada en la Catedral San Rafael presidida por David Retamoso (vicario parroquial de San Carlos Borromeo de Sunchales) y concelebrada por Alexis Cardo (vicario parroquial de San Rafael), Hugo Barbero (párroco de Susana) y Roberto Barón (Sagrado Corazón), ante un templo lleno de gente.
“También estamos celebrando la pascua de nuestro querido papa Francisco que hoy a partido hacia el cielo y estamos rezando especialmente por él. Un Papa al que hemos querido tanto, de nuestra tierra y de nuestro pueblo; el Papa de los gestos, que nos ha hablado con un lenguaje sencillo, que nos ha acercado a Dios de una manera tan simple. Por él rezamos, queremos dar gracias hoy por su ministerio y rezamos también para que hoy ingrese al cielo”, destacó Cardo durante la homilía.

Aprovechó para hacer una comparación con el Hijo de Dios resucitado: “tres aspectos de la aparición de Jesús resucitado hoy nos dan tres notas del ministerio de Francisco. Jesús eligió para aparecerse en primer lugar a un grupo de mujeres, que en aquel tiempo su testimonio no era considerado válido en la vida pública. Si algo que caracterizó al magisterio del Papa fue justamente esto, lo decía él hace poco tiempo: ´en la Iglesia entran todos, todos, todos´. El Papa que nos habló incansablemente de la misericordia, proclamando un año extraordinario en 2016; nos confirmó con tantas palabras y gestos, que en la Iglesia hay lugar para todos. Siempre nos invitó a que en la Iglesia toda persona tenga lugar, sin importar ninguna condición. Hoy lo recordamos como el Papa que siempre nos invitó a abrir las puertas a todos”.
Y agregó: “si hay que caracteriza la presencia de Jesús resucitado en el corazón de una persona es la alegría. De hecho, el Papa en la encíclica Gaudete et exsultate (2018), alégrense y gócense, que nos habló sobre la santidad, y dijo cuáles son las notas de la santidad en el mundo actual: la alegría y el buen humor; en esa persona cristiana que lo manifiesta en su actitud hay signos de santidad; por el contario, en una persona que todo el tiempo aparece la queja, el descontento, la ansiedad, hay algo que no está bien. Una nota que caracterizó todo su magisterio fue la alegría, comenzó su pontificado, regalando la exhortación Evangelii gaudium (2013), la alegría del evangelio, y también otra como Amoris laetitia (2016), la alegría del amor, sobre la familia y la santidad”.
Más adelante, “nos invitó a vivir nuestra vida de cristianos con alegría; el cristianismo no puede ser una carga porque si no hay algo que estamos viviendo mal, se vive con alegría. También utilizó aquella expresión ´no quiero cristianos con cara de vinagre, quiero cristianos alegres´, que realmente anuncien porque han sido testigos de la resurrección que Jesús transformó sus vidas”.
En otra parte, Cardo dijo que “creo que si hay algo que podemos reconocer y valorar es que ha sido el gran Papa de la fraternidad, nos ha invitado este último tiempo a la sinodalidad de caminar juntos, que ha tenido tantos gestos con líderes de otras religiones y de otros lugares. El Papa que cuando salió al balcón por primera vez se presentó como el obispo de Roma, como queriendo simpatizar también con las religiones ortodoxas. Siempre tuvo un montón de gestos por invitarnos a la fraternidad, a la amistad social, quería un mundo fraterno”.
Finalmente, “hoy queremos dar gracias a Dios por la inmensa sabiduría y riqueza que nos ha dejado el Papa en nuestra Iglesia. El Papa que Dios ha elegido para este tiempo, que quizás con el tiempo nos iremos dando cuenta de toda la riqueza, sabiduría y todo el bien que hizo a la Iglesia. Pedimos por él esta eucaristía; también le pedimos hoy a Jesús resucitado que reine en nuestros corazones y nos ayude a vivir las notas que el Papa nos quiso enseñar a vivir con la presencia de Jesús como la alegría y la fraternidad, haciendo parte a todos. Que hoy lo reciba al Papa en el cielo”.