La Municipalidad de Rafaela continúa promoviendo alternativas productivas sustentables. Si bien en la ciudad se trabaja hace tiempo a escala familiar, con el resultado de varias huertas domiciliarias en marcha, desde el año pasado se potencia el trabajo a gran escala.
Para el Estado local este tipo de formas de producción de alimentos son muy importantes de promover, para demostrar que pueden ser un modelo de alimentación saludable y de trabajo; y que el día de mañana, quienes se están formando, puedan tener su emprendimiento laboral.
La huerta comunitaria que funciona en el DIAT, es llevada adelante por un grupo de más de 12 personas de 18 a 55 años de edad. Entre las actividades previstas hubo y hay espacios de formación teórico-práctico para el manejo de la tierra y el cultivo, que son llevados adelante por técnicos y profesionales del INTA y del municipio.
La iniciativa que comenzó hace 10 meses, avanza firmemente y muestra una gran oportunidad laboral, de alimentación saludable y de apoyo a quienes asisten. El objetivo es promover la producción sustentable, la soberanía alimentaria, el empleo verde a nivel local y el desarrollo social de quienes asisten al establecimiento.
El espacio tiene una concepción social y agroecológica, en relación al trabajo y al tratamiento que se les da a las especies plantadas. Actualmente hay tomate, maíz, repollo, lechuga, achicoria, rúcula, acelga, espinaca, remolacha, calabaza, berenjena, entre otros. Además, cuenta con especies aromáticas y plantas diversas.
Los desafíos a futuro son poder consolidar el proyecto, seguir incorporando personas al trabajo en el territorio y comenzar a generar esquemas de comercialización de lo que allí se produzca, más allá del autoconsumo.
Detalles de la huerta
La huerta comunitaria es un proyecto que busca promover a nivel local la producción de alimentos orgánicos (verduras, legumbres y hortalizas) a escala familiar, pero también para la venta como ingreso complementario o principal de una familia.
Los beneficiarios cuentan con capacitaciones, acompañamiento, provisión de insumos críticos, asistencia técnica, fortalecimiento de conocimientos para la comercialización, mercados de proximidad y cadenas cortas, articulación interinstitucional, construcción y circulación de conocimientos, planificación de nuevas acciones; todas estas acciones están a cargo de técnicos y profesionales de INTA y del Gobierno municipal.
Muchas de las personas que asisten son mujeres y jóvenes; eso también tiene que ver con un perfil del municipio respecto al empleo verde y a la producción a gran escala, priorizando sectores más vulnerados o con menores oportunidades.
Trabajo articulado
Esta iniciativa se enmarca en el trabajo continuo que el Instituto para el Desarrollo Sustentable y la Secretaría de Producción, Empleo e Innovación vienen llevando adelante en relación al empleo verde y a la promoción de la producción sustentable.
Se lleva adelante en articulación con la Secretaría de Desarrollo Humano y su trabajo en favor de la inclusión social en la ciudad; y en el marco del trabajo articulado entre el municipio, el Gobierno Provincial e INTA Rafaela.
El proyecto también es posible gracias a los aportes económicos del Ministerio de Producción, Ciencia y Tecnología del Gobierno de Santa Fe.
Huerta comunitaria en Libertad Asistida
Otro espacio que cuenta con una huerta comunitaria para quienes asisten a la institución es Libertad Asistida.
En este espacio durante el año 2021 y en el marco del programa Empleo Verde, se generó una formación en producción hortícola a gran escala de la cual participaron 10 emprendedores y productores locales. La formación estuvo a cargo de la Ingeniera Agrónoma, Sofia Chasco.
Además de brindar conocimientos en el tema, se busca potenciar y profesionalizar emprendimientos de frutas, verduras y hortalizas que ya estén en marcha.
Estas iniciativas contribuyen al bienestar, y tienen que ver con la salud, con el cuidado del ambiente y con el empleo.