Por Emlio Grande (h.).- Anoche se realizó la «Jornada sobre familias y empresas aliadas construyendo una buena sociedad. ¿Cómo equilibrar el tiempo laboral y familiar?», en el SUM del CCIRR, a cargo de la doctora Paola Scarinci de Delbosco, organizado por ACDE (Asociación Cristiana de Dirigentes de Empresa), ante un buen marco de público.
«El disparador del por qué me dediqué a estudiar ésto es mi propia experiencia personal. Estoy casada hace casi 45 años y tengo 9 hijos, quienes estudiaron en las universidades y ahora todos trabajan, haciendo crecer a los hijos con una presencia buena de padre y madre, con un trabajo profesional, en mi caso era part-time. Entendí qué importante era decirles a otras mujeres que esto se puede hacer y tiene algunos beneficios, con una buena organización», destacó Delbosco en una entrevista con este cronista. Recordó que vino otras veces a Rafaela y conoce bastante sobre la historia lugareña forjada por los inmigrantes, especialmente piemonteses.
Y agregó: «El otro aspecto es que la empresa lo entendiera, el lugar donde una persona trabaja, sobre todo la mujer, porque el varón estaba tan acostumbrado a dedicar todo su tiempo al trabajo y muy poco tiempo a la casa; entonces el peso de la modificación del ámbito de trabajo pesaba más sobre los hombros de la mujer que del hombre. Después de 25 años de dedicarme a esto, las cosas han cambiado para bien en la Argentina; no es contracultural que una mujer que se preparó quiera trabajar y las empresas entienden que para retener personas talentosas tienen que ofrecer alternativas para que puedan conciliar su vida profesional de buen nivel con una vida familiar y privada también de buen nivel. Se inventaron algunas alternativas, algunas por sugerencias de las mismas personas y otras como ofrecimiento de la empresa en un gesto de acercamiento y confirmación de la confianza que les están dando y hay que responder con compromiso laboral; entonces se le da flexibilidad a alguien porque su respuesta es requerida y valorada».
Luego de la presentación formal del doctor Ariel Trinadori (integrante de ACDE), la visitante abordó lo que se está haciendo y lo que todavía se puede hacer para equilibrar el tiempo del trabajo con el tiempo de la familia, el compromiso por la integridad y la base de la consistencia personal y empresarial. También asistieron el obispo diocesano Luis Fernández, el director de la UCSE DAR Edgardo Allochis, empresarios, profesionales, entre otros. Esta actividad se repetirá este jueves 17 de octubre a las 19 horas en la Bolsa de Comercio de Santa Fe.
¿Cómo está la Argentina en este contexto laboral-familiar?
Después de 25 años, este país tiene un 57% de matrícula femenina en las universidades públicas, más de la mitad de los que están estudiando son mujeres y llegarán a la adultez con la intención de utilizar la preparación que han adquirido en las casas de estudio. Sin embargo, el peso de la tarea familiar no puede estar repartido 50%, se intenta hacerlo pero hay una cuestión real, por ejemplo el embarazo y el amamantamiento son de la mujer. Hace falta que el varón y la mujer sean aliados, entiendan que para cada uno es importante la cercanía con los hijos y también una realización en el ámbito laboral. Además, una alianza de los hijos cuando crecen, dándoles responsabilidades en la medida que puedan asumirlas, una alianza con las instituciones, las escuelas, las universidades, las empresas, para que se entienda que una empresa trabaja dentro de una sociedad y donde hay familias que funcionan es una mujer sociedad.
¿Cuál es el grado de conciencia que tienen los empresarios en este cambio de paradigma laboral?
Hay más que antes porque hay prácticas de consideración que vienen desde lejos, cada vez hay más empresas que entienden que su política de atracción y retención de talentos para que la gente capaz quiera quedarse, dependerá del ofrecimiento de ciertas flexibilidades y acompañamientos en las distintas etapas de la vida. Hay una organización internacional que se ocupa de ver cómo cambia el clima de las empresas cuando hay un acercamiento a la vida personal y familiar de los colaboradores.
En tu caso, sos esposa y tenés 9 hijos, como profesional sos docente e investigadora, ¿cómo buscaste un equilibrio en tu experiencia personal?
Yo no dependí demasiado de horarios estrictos, salvo cuando tengo que dar clases que sí tengo horarios; en general tengo bastante flexibilidad, me gusta estudiar y me concentro inclusive en el ruido, que es una ventaja. Sin embargo, la gran diferencia entre poder hacer eso con una familia numerosa y no poder hacerlo es una organización, es decir que no se pierda tiempo. A la mañana me despierto con una especie de estructura a groso modo de lo que voy a hacer, no diría que cumplo todo pero me ordeno y me ayuda bastante, hago que el tiempo me aproveche; utilizo los llamados «tiempos muertos», colas y momentos de espera, para diagramar una charla o llevo algo para leer.
Respecto al contexto económico con las crisis recurrentes en la Argentina, ¿cómo influyen en los ámbitos familiar y laboral?
Hace 45 años que vivo en este país y no sé qué número de crisis estamos atravesando (risas). Para la vida familiar se ha vuelto casi imprescindible el trabajo de los dos, por una cuestión económica cada vez hay más mamás que trabajan fuera de su casa; muchas mujeres de bajos recursos trabajan informalmente, ganan menos y tienen menor seguridad para su futuro, con lo cual profesionalizarse sería muy bueno porque le da inclusive cierto resguardo para la vejez en el momento del retiro. Si sabemos organizarnos bien y tener una presencia inteligente con nuestros hijos, cuando ellos crezcan y nos necesiten un poco menos que cuando eran chiquitos, van a estar orgullosos de las cosas que hacemos, si hemos sabido mantener lazos frescos y constantes con ellos cada día.
Amplio currículum
Es doctora en Filosofía y Letras de la Universidad La Sapienza de Roma; profesora del área académica empresa, sociedad y economía del IAE Business School de la Universidad Austral; profesora del curso de ética del programa líderes de AACREA; profesora de enseñanza secundaria, normal y especial en Filosofía, otorgado por la Facultad de Filosofía y Letras de la Pontificia Universidad Católica Argentina (PU CA); profesora adjunta en la cátedra de Historia de la Filosofía Contemporánea de la Facultad de Filosofía y Letras de la PUCA desde 1979; miembro del comité de ética de la Cámara Sueco-Argentina de Comercio; miembro de número de la Academia Nacional de Educación.
Publicó varios libros, algunos en coautoría con colegas: «Derechos Humanos: siete casos controvertidos en América Latina», «La calidad televisiva», «Integridad: un liderazgo diferente», «La responsabilidad de la empresa en la sociedad», «El desafío de cada día: familia y profesión (re) conciliadas», «Dar sentido a la empresa». Su lengua materna es el italiano (nació en Treviso), mientras que ella también habla español, francés, inglés, griego y latín. Está casada con Héctor Delbosco, teniendo 9 hijos y 31 nietos.
Para esta actividad acompañó el Centro Comercial e Industrial de Rafaela y la Región; invitaron la Universidad Católica de Santa Fe y la Universidad Católica de Santiago del Estero Departamento Académico Rafaela. También adhirieron VMC Refrigeración SA, Valuar SA, Parra Hotel & Suites, Ana Zbrun de Oggier, CPN Jorge Ghiano, Transporte Nueva Roma, Dra. Marisol Escandell, Supermercados Pingüino, Nicola chapa y pintura, Dr. Hugo Alfonso, Rapiflet Carolina, Sueño Dorado, Expreso Santa Rosa, Laser alarmas, Colegio San José, Inverpoint, Molsicol, Jorge Torres máquinas para coser, Dres. Rodolfo y Lucía Zehnder, Estudio Possetto Mosconi & asociados, Induquimika, Dra. Mónica Schmutzler y Trípode constructora SRL.