No es algo nuevo que en la “ciudad modelo” o “isla” considerada por algunos iluminados, entre tantas materias pendientes está la necesidad urgente de construcción de nuevos planes habitacionales que tengan continuidad en el tiempo.
El jueves último un grupo de vecinos –entre adultos y chicos- de un asentamiento irregular del barrio Monseñor Zazpe al norte de nuestra ciudad se manifestó frente al edificio municipal cortando la calle al mejor estilo piquetero que se viene observando desde los últimos años en la Argentina kirchnerista.
Están enojados por la adjudicación del último plan de Cáritas de 151 casas de las cuales en algunos casos se habrían entregado a personas que no reunían los requisitos, que dicho sea de paso no fue por sorteo, el método del azar que se viene utilizando en los últimos tiempos con los planes habitaciones que llevan adelante con fondos nacionales y provinciales.
En la oportunidad se cruzaron duramente con funcionarios municipales (Mario Rossini y Marcelo Lombardo) y concejales de la de la oposición (Germán Bottero y Atilio Pignoni), en el que también se vivieron momentos de tensión. Ahora quedaron en reunirse el próximo lunes.
Según cifras oficiales, hay una demanda de casi 4.000 personas anotadas en el Registro Unico de Inscripción Permanente, que son los tienen interés de acceder a una casa propia a través de un plan social.
En este contexto hay que decir que la Perla del Oeste explotó socialmente, basta mirar los guarismos de población, con unos 100.000 habitantes (hay que ver las cifras del censo de octubre) frente a los casi 54.000 que había hace 30 años, producto del éxodo migratorio que viene a nuestra ciudad, generando un sinnúmero de problemas, entre ellos los habitacionales, laborales, salud, educación, tránsito y también de inseguridad.
Pero volvamos al problema que nos ocupa el de la vivienda propia, no solamente aflige a los sectores más vulnerables de la comunidad sino también a la tradicional clase media que le cuesta cada vez más acceder a un techo propio porque los lotes están elevados o sobrevaluados y los créditos bancarios son casi inexistentes o a tasas que están por las nubes.
Tampoco hay que olvidarse que en la construcción de los planes habitacionales se fue mejorando el sistema comparado a 30 años atrás cuando se otorgaban a dedo o por cuña política, de todas maneras se debe mejorar en el cobro de las cuotas que no son elevadas con controles por parte de los gobiernos provincial y municipal, porque la morosidad es un problema endémico al que no escapa Rafaela.
A decir verdad, este problema habitacional no se resuelve de la noche a la mañana y en este año electoral se escucharán propuestas de distintos sectores políticos. Hay que fijar objetivos a mediano y largo plazos con la participación de distintos actores sociales.
Necesidad urgente de viviendas en Rafaela
Se trata del editorial del programa "Sábado 100" por Mitre Rafaela (FM 91,9) que conduce Emilio Grande (h.). El problema habitacional no se resuelve de la noche a la mañana y en este año electoral se escucharán propuestas de distintos sectores políticos. Hay que fijar objetivos a mediano y largo plazos con la participación de distintos actores sociales.