Por Emilio Grande (h.).- A decir verdad, la Argentina está viviendo uno de los peores momentos institucionales de los últimos 40 años desde que se restauró la democracia con una decadencia en todos los niveles: políticos, económicos, sociales, culturales, entre otros.
En este contexto, en la apertura del año legislativo en el Congreso el presidente Alberto Fernández lanzó durísimas críticas contra la Corte Suprema de Justicia por la coparticipación a la ciudad de Buenos Aires y la inconstitucionalidad del Consejo de la Magistratura, ante la presencia del presidente Horacio Rosatti y del vicepresidente Carlos Rosenkrantz.
Nunca un Presidente había llegado a tanto cuando se refirió al Poder Judicial en la asamblea institucional más importante del año, como constituye la apertura de la sesiones ordinarias del Congreso, mostrando una furia más de un patotero que de un profesor de Derecho. ¡Qué ejemplo para sus estudiantes! Sin olvidar que el propio Alberto anunció el juicio político a la Corte en su mensaje de año nuevo, hasta ahora sin respaldo legislativo.
Al mismo tiempo, defendió a su mentora Cristina Fernández de Kirchner por la supuesta proscripción política y electoral debido a la condena de seis años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos de un tribunal oral en primera instancia por los hechos de corrupción durante su Gobierno, pero tiene que ser confirmada por la Cámara de Casación Penal y el máximo tribunal.
Por su parte, el intendente Luis Castellano habló durante casi 40 minutos sin grandes anuncios ni tampoco con tantas precisiones, durante la apertura legislativa en el Concejo Municipal, sin la presencia de representantes de entidades intermedias ni tampoco de la CGT. Seguramente, buscará ir por un cuarto mandato ante la incapacidad por formar nuevos dirigentes en su sector político.
Enumeró obras y programas como la pacificación de las avenidas Fanti, Santa Fe e Italia, la semaforización de avenidas, el cambio de mano en la circulación de calles transitadas, la construcción de 2 nuevas rotondas en el ingreso oeste, disminuir el uso de vehículos y el incremento de la bicicleta y el transporte público.
En 2022 funcionarios municipales anunciaron el proyecto para mejorar el servicio de minibuses con recorridos directos y frecuencias más cortas, pero hasta ahora sigue todo igual.
También el Intendente mencionó la inauguración de los canteros del bulevar Santa Fe en el microcentro, obra que demoró más de lo previsto.
De todas maneras, no son pocos los vecinos que se quejaron en no destinar mayor espacio verde absorbente como establece el nuevo Código Urbano.
Castellano adelantó un nuevo plan de pavimento, que una vez finalizado dejará a Rafaela con el 83% de calles pavimentadas cuando hace dos años habló de llegar al 100% de las arterias con pavimento, como lo remarcó el concejal Leonardo Viotti.
Dijo que Rafaela se ha postulado, junto a la provincia de Santa Fe, para ser una de las 3 ciudades sede de los XIII Juegos Suramericanos ODESUR, que se celebrarán en 2026, con la participación de más de 50 disciplinas deportivas y más de 7.000 atletas de 15 países del continente sudamericano.
De ser así, urge la reactivación de vuelos aéreos semanales a Buenos Aires, teniendo una pista pavimentada ociosa en el Aero Club. El edil Ceferino Mondino opinó que Rafaela tiene un atraso de 30 años en infraestructura deportiva y el Municipio no apoya a los deportistas de alto rendimiento.
Se jactó al decir que “estamos en el proceso para la edificación de 2 escuelas más en los sectores sur y suroeste de la ciudad”.
Conviene recordar que el Concejo votó hace unos años la donación de un terreno en el barrio La Cañada para una nueva escuela.
Finalmente, sostuvo que “diseñamos las condiciones para la necesaria modernización de la administración pública y se traducirá en un proyecto de discusión de un nuevo convenio colectivo junto al SEOM”.
No hay olvidar la reciente denuncia gremial y de los delegados, reclamando mejores condiciones laborales, del deficiente parque automotor e infraestructura edilicia.
Los discursos pronunciados por el presidente Alberto Fernández y el intendente Luis Castellano, en las respectivas aperturas legislativas, dejaron mucho que desear, especialmente porque viven lejos de los problemas de la gente de a pie, que sufre diariamente la escalofriante inseguridad y la galopante inflación…