Por Emilio Grande (h.).- La Escuela de Educación Técnica fue fundada con el nombre de Escuela de Mecánicos Agrícolas, teniendo como creador al doctor Manuel Menchaca, entonces gobernador de la provincia de Santa Fe, quien fue un visionario para su época. Fue creada el 6 de mayo de 1915 e inaugurada el 24 de octubre del mismo año, iniciando sus actividades en 1916.
Emplazada en el foco de un área agrícola y destinada a la instrucción de los jóvenes hijos de colonos en el manejo de las maquinarias y herramientas propias de esta actividad económica. La formación estaba complementada con conocimientos de cultura general que apuntaban a una formación integral de los educandos.
Comenzó en un cuerpo de galpones de zinc con piso de tierra, teniendo oficinas administrativas y directivas, aulas y talleres. En los inicios funcionaban tres secciones de taller: Herrería, Carpintería y Mecánica. Su primera promoción, en 1917, contó con 8 egresados. Sus alumnos comenzaron a incidir en forma notoria en el desarrollo industrial de la zona.
La Escuela crecía de modo significativo, por lo cual debía evolucionar acorde con los tiempos; en 1934 la denominación institucional cambió: Escuela Industrial de Varones «Guillermo Lehmann», un justo reconocimiento al fundador-formador de Rafaela.
En 1948 la Escuela se nacionalizó al ser transferida a la Comisión Nacional de Aprendizaje y Orientación Profesional y su nueva denominación fue Escuela Fábrica Nº 6 de la Nación.
En 1959 se creó el Consejo Nacional de Educación Técnica y se introdujeron innovaciones en los planes de estudio; pasándose a denominarse Escuela Nacional de Educación Técnica Nº 1 «Guillermo Lehmann».
En 1993 la institución es transferida a la provincia adoptando el nombre que conserva hasta el presente: Escuela de Educación Técnica «Guillermo Lehmann» y en 1994 le fue asignado el Nº 460.

Durante estos 110 años de vida institucional dirigieron al establecimiento Héctor Harispe (1915-1916), Antonio Caruso (1916-1948), Julio Scuccimarra (1949-1953), Antonio Poupeau (1953-1983), Angel Gamba (1983-1986), Roberto Marini (1987-2011), Marcelo Blazquez (2011-2017), Jorge Bonfietti (2017-2022) y Walter Rohrmann (2022 hasta la actualidad).
“Como director de la escuela técnica más antigua de la ciudad y zona, de la cual también soy exalumno, tomé el compromiso de trabajar en equipo junto a todo el personal para brindar educación de calidad, inclusiva y no arancelada”, destacó Rohrmann en la presentación realizada en 2024 en el Nuevo Banco de Santa Fe frente al director ejecutivo del INET, personal de la Dirección de Técnica de la Provincia, empresarios locales y otras escuelas técnicas de la zona.
Y agregó: “Queremos preparar a los estudiantes para los desafíos con los que se encontrarán en el mundo real al transitar sus prácticas profesionalizantes por las empresas y pymes locales, previendo que tengan las menores diferencias posibles entre lo que aprenden en la escuela y lo que pondrán en práctica en la vida real. Si no podemos invertir en nuevas tecnologías, el salto tecnológico entre la escuela y la empresa se transforma en una barrera que sólo acrecienta la brecha entre estudiantes y profesionales”.

Adaptándose a los cambios cada vez más rápidos y profundos de la sociedad, la Escuela fue transformando su fisonomía y objetivos, modificando sus antiguos talleres en dependencias acordes a las necesidades que requiere cada especialidad, contando hoy con Oficina Técnica, Laboratorios de Informática, Laboratorio de Físico-Química, Unidad de Cultura Tecnológica y Biblioteca Técnica. El establecimiento mantiene un nivel educativo eficiente, actualizado y acorde con las necesidades de la comunidad.
Cuenta con 6 divisiones de 1º año, e igual cantidad de 2º año y 4 modalidades de educación secundaria obligatoria: Electromecánica, Electrónica, Informática y Maestro Mayor de Obras. Además, funcionan más de 10 cursos de formación profesional en Tornería, Soldadura, Carpintería maciza y de placa, Arduino, Alemán, Electricidad domiciliaria, Motores diesel y nafteros, Informática aplicada a tareas administrativas y hojas de cálculo, entre otros. Actualmente, asisten 1.208 alumnos y su plantel docente y no docente lo conforman 165 personas.
También hay que hacer mencionar el aporte del Centro de Exalumnos, la Asociación Cooperadora, las familias que colaboran con la cuota mensual de Cooperadora y algunas empresas, quienes garantizan los gastos de funcionamiento escolar. El Centro de Estudiantes es muy activo, colabora con la gestión, el buen clima escolar, la distribución de información a tiempo y las actividades para recaudar fondos, que son aportados para elementos de educación física, calculadoras, entre otros.
En el marco del centenario de Rafaela en 1981, la Escuela se unió a los homenajes a través de la concreción del proyecto «la campana del siglo», preparándose en sus talleres la fundición de esta.
La Escuela trasciende al medio a través de diferentes expresiones educativas, culturales y deportivas, por medio de la participación de los alumnos en torneos, campeonatos, concursos y olimpíadas que ha sido constante y destacada a través del tiempo.
Por sus aulas pasaron generaciones sucesivas que al egresar se incorporaron a las diferentes actividades locales y en el ámbito nacional. Surgieron talleres e industrias dirigidos por los exalumnos, profesores, industriales, directivos técnicos, ingenieros que vienen contribuyendo al avance de la técnica y la tecnología. Además, tiene un himno elaborado con acordes de Sergio Baronetti (profesor jubilado) y la letra de Horacio Pruvost y Ernesto Moreno, y se realizó un video a cargo de José Laetcher (preceptor actual) en voz y el citado Baronetti.
Por este motivo, el Concejo Municipal declarará de interés municipal este 110 aniversario de la Escuela con un proyecto presentado por el bloque Juntos por el Cambio y Unidos para Cambiar Santa Fe, durante la sesión ordinaria a realizarse el jueves 30 de octubre a las 9:00 horas en la sede escolar de calle Pueyrredón 649.
Finalmente, es necesario hacer una memoria agradecida y un merecido tributo a los que partieron, a los que se retiraron después de muchos años de labor tesonera, a los que siguen y a quienes acompañan con su apoyo y aliento. Es una invitación a perseverar en el trabajo cotidiano para que la EETP 460 «Guillermo Lehmann» siga irradiando su luz precursora de éxito y progreso.







