Como estaba previsto se desarrolló en la víspera el homenaje a los denominados por la historia como «los valientes de Formosa» por parte del espacio ACHA (Agrupación de Ciudadanos por la Historia Argentina) y de vecinos autoconvocados.
Ocurrió ayer domingo a la hora 17.00 frente al mástil mayor de la ciudad de Rafaela, el cual luce orgullosa nuestra bandera nacional, ubicada en Avenida Santa Fe, frente a la Jefatura de Policía.
Este homenaje consistió en la presentación de la «placa recordatoria» de ese fatídico y sangriento hecho ocurrido el 5 de octubre de 1975 en pleno gobierno democrático ejercido por la presidente constitucional María Estela Martínez de Perón, en el Regimiento de Infantería de Monte 29 de la ciudad de Formosa.
En el mismo, nuestra ciudad también fue partícipe activa, ya que los conocidos como Montoneros (guerrilleros asesinos y antipatriotas) al escapar cobardemente desde Formosa, en un avión de la empresa Aerolíneas Argentinas, aterrizaron en una estancia ubicada entre las localidades de Susana y Angélica, muy cercana a nuestras ciudad y, que para tal fin, contaron con la complicidad y apoyo logístico de ciudadanos de Rafaela.
Además de la placa, se guardó un minuto de silencio y se depositó una ofrenda floral en memoria de los caídos y partícipes; fueron ellos soldados conscriptos, policías, civiles y personal militar, que con sus actitudes, hasta perder la vida defendieron la democracia conseguida por el pueblo argentino hacía solamente un par de años.
«Destacamos que la mencionada placa recordatoria será emplazada definitivamente en la conocida Plaza de la Memoria, ubicada en la zona del barrio Villa Podio, con el fin que se conozca toda la verdad sobre nuestra historia argentina, particularmente de Rafaela, y no solamente una parte, ya que la memoria es parte de la historia y no es la historia completa», según informó ACHA (Agrupación de Ciudadanos por la Historia Argentina) con un comunicado de prensa.
La sangre derramada en Formosa
Sucedió el domingo 5 de octubre de 1975 en Formosa, en el Regimiento de Infantería de Monte 29, durante la presidencia de Maria Estela Martínez de Perón, que se encontraba reponiendo de problemas de salud. Ocupaba su lugar el senador Ítalo Luder, quien conducía un gobierno que naufragaba en medio de una tormenta de violencia, inflación y denuncias de corrupción generalizada. Unos 70 terroristas participaron en forma directa en esta sanguinaria operación, que tuvo cinco etapas, algunas de ellas simultáneas:
- Secuestro del vuelo 706 de Aerolíneas Argentinas, con 102 pasajeros y seis tripulantes, que se dirigía a Corrientes pero fue desviado a Formosa, a 1.190 kilómetros de Buenos Aires.
- Copamiento del aeropuerto internacional “El Pucú”, en la entrada de la capital formoseña, acción que cobró la vida de un policía.
- Ataque al Regimiento de Infantería de Monte 29. Los Montoneros creyeron que los soldados de guardia, que cumplían con el servicio militar obligatorio, depondrían las armas, pero no fue así. Allí murió Roberto Mayol, el soldado que abrió las puertas del cuartel, traicionando a sus compañeros y a la patria un estudiante de abogacía en la UNR (Universidad Nacional de Rosario) en la cual tiene hoy una placa de honor en esa Universidad, siendo traidor a la Patria, que además era cuadro dirigente con el grado de oficial segundo de Montoneros.
- Fuga de los guerrilleros que sobrevivieron al ataque en un Boeing 737-200 de Aerolíneas Argentinas y un Cessna 182 de cuatro plazas que sirvió para confundir en el aire a los perseguidores.
- Aterrizaje del avión de Aerolíneas Argentinas a 700 kilómetros de Formosa, en una pista preparada para la ocasión en una estancia cercana a Rafaela (entre Susana y Angélica) con apoyo logístico de gente precisamente de esa ciudad. El Cessna bajó en las afueras de Corrientes.
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