Hace 10 años, cuando adiestraba (cronometraba) a su hijo Luciano, de 21 años, en el Club Peñarol de Elortondo, localidad del departamento General López, a 317 kilómetros al sur de la capital provincial, donde se crió, aprendió a jugar al básquetbol y fútbol y del que nunca se olvidó y amaba apasionadamente, el corazón le dijo basta a Miguel Angel Cuello, quien fuera monarca mundial de los Medio Pesados, dejando de existir a los 53 años de edad.
El elortondense había nacido el 27 de febrero de 1946 y dejó de existir el 14 de septiembre de 1999, el “Día del Boxeador”. El Consejo Mundial de Boxeo (CMB) declaró a dicha fecha “Día de Luto Mundial” para esa disciplina.
PALMARES
El palmarés del “Lita” Cuello indicaba 22 combates librados en el ámbito profesional, con 21 triunfos (20 de ellos por la vía rápida) y un sólo traspié.
Cuello fue el decimoquinto campeón argentino de la categoría medio pesado, al vencer el 7 de marzo de 1975, en el Córdoba Sport Club de la capital de la “docta” a Raúl Arturo Loyola, por abandono, cuando el cetro estaba vacante.
El 21 de mayo de 1977, derrotó por nocaut en la segunda vuelta al estadounidense Jesé Burnett, en Montecarlo, Mónaco, obteniendo el campeonato de la categoría Medio Pesado del Consejo Mundial de Boxeo (CMB).
PUPILO DE BRUSA
Cabe consignar que luego del distanciamiento del “Grandote” Brusa y del campeón mundial de los Medianos, Carlos Monzón de Juan Carlos “Tito” Lectoure, la campaña de Cuello se alejó del Luna Park, incursionando en el extranjero.
El prestigioso adiestrador santafesino estuvo en su rincón aquella noche. “Escopeta” Monzón o el “Gaucho de Hierro”, al finalizar la contienda subió al ring para abrazar a Cuello. El pupilo de Amílcar Brusa estaba en preparativos para la revancha con Rodrigo Valdez que se realizó dos
meses después en Francia.
TALENTOSO PELEADOR
El “Lita” Cuello fue considerado como un talentoso peleador que realizó una campaña corta, pero exitosa, siendo la prueba de que un pugilista no necesariamente necesita muchas peleas para llegar al más alto nivel universal. Su entrenador fue el legendario maestro Amílcar Oreste Brusa y su manager el italiano Humberto Branchini.
EN EL CAMPO AMATEUR
En el campo aficionado, comenzó a combatir cuando tenía 21 años y estaba realizando el servicio militar obligatorio. Cuello representó a nuestro país en los Juegos Olímpicos de 1972, competencias muy sangrientas por los lamentables sucesos políticos.
EN LOS JUEGOS OLIMPICOS DE MUNICH
El boxeador argentino se impuso por decisión a Ottomar Sachse (Alemania Oriental), los jueces votaron a su favor cuatro a uno y a Marin Culineac (Rumania) por nocaut en el segundo capítulo, perdiendo ante el campeón olímpico Mate Parlov (Yugoslavia) por abandono, su sombra negra en la campaña deportiva. En forma insólita, creía que estaba en la Argentina y había llegado tarde al escenario de las lides.
CAMPEON ARGENTINO
El elortondense se hizo profesional cuando tenía 27 años. Con el poder de su pegada ascendió rápidamente hasta dos años después ganarle el título argentino a Raúl Loyola.
Ese título lo había dejado vacante Víctor Galíndez el 7 de diciembre de 1974, por ese entonces, campeón mundial por la Asociación (AMB). La faja nacional la expuso dos veces , el 13 de junio del año siguiente ante Roberto Aguilar a quien noqueó en tres asaltos en Venado Tuerto y el 10 de octubre Ivan Rojas sólo le aguantó cuatro capítulos en Rosario.
EN EL ORDEN INTERNACIONAL
Fue exitoso su debut en el orden internacional cuando el 13 de diciembre de 1975 venció en París (Francia) en dos vueltas por nocaut técnico al galo Charles Freeman, cuando abandonó el país junto a Brusa debido a las diferencias con “Tito” Lectoure.
En la temporada siguiente consiguió cinco triunfos consecutivos que lo ubicaron en la serie “A” del escalafón mundial de los Medio Pesados del CMB, sometiendo sucesivamente en la capital francesa a Phil Matthews (KOT en la segunda vuelta); a Ray Anderson (KO en el sexto rounds), en Hamburgo, Alemania; en Kiel, en el país germano a Mario Almanzo (KO en el segundo asalto); a Wayne Magee (KOT en cuarto capítulo), en Milan, Italia y al alemán Kurth Luedecke (KOT en el primer peldaño) en la misma ciudad italiana.
CONSAGRACION MUNDIAL
En el día más feliz de su vida, el 21 de mayo de 1977, con un plan estratégico y táctico elaborado por Amílcar Brusa, el “Lita” Cuello le propinó una verdadera paliza a Jesé Burnett, noqueándolo en la segunda vuelta, obteniendo el titulo mundial de los Medio Pesados.
Evidentemente, la gran popularidad del peleador de Vedia le quitó un poco de espacio a la consagración de Cuello ante Burnett.
Una lesión en la pierna derecha demoró la fecha del combate con Parlov. Cuello –sólo acompañado por su entrenador José Batista– estuvo cuatro meses en Europa buscando una condición física que nunca encontró, por su entonces irregular estilo de vida.
Brusa se había alejado de Cuello debido a su falta de profesionalidad y
Parlov lo noqueó en el noveno asalto.
El reinado de Parlov también fue efímero. Marvin Johnson (el mismo que después destronó a Víctor Emilio Galíndez) lo derrotó en la segunda defensa de su título.
RETIRO SIN PENA NI GLORIA
Sin invicto ni título universal, el “Lita” Cuello anunció su retiro a los 31 años, habiendo despilfarrado con sus amigos, el tango, las mujeres y la noche porteña todo lo que económicamente (sobre la base de su esfuerzo) había ganado en su breve y dura campaña deportiva.
REGRESO AL PAGO CHICO
Arrepentido, volvió junto a los seres queridos a su Elortondo natal, que lo volvió a cobijar, donde comenzó a trabajar en la formación de boxeadores, especialmente de chicos procedentes de sectores humildes y desprotegidos y hace 10 años murió siendo joven, mientras cronometraba en el gimnasio del Club Peñarol a su hijo Mariano de 21 años de edad.
Por Tomás Rodríguez (Santa Fe)