Por Emilio Grande (h.).- Luego de la reunión entre representantes del Centro Comercial e Industrial de Rafaela y la Región, sus cámaras de profesionales, concejales y funcionaros del Ejecutivo local, donde se abordó la habilitación de los sectores que no necesitan de grandes intervenciones para su uso, mientras que se continúe avanzando en los lineamientos generales para el sector, que abarca un total de 1.200 hectáreas, este cronista consultó a algunos ediles para conocer su mirada al respecto.
En la oportunidad, asistieron el presidente del Concejo Germán Bottero, Leonardo Viotti, Alejandra Sagardoy, Miguel Destéfanis, Lisandro Mársico, Martín Racca y Valeria Soltermam. Del Municipio estuvieron Diego Martino (secretario de Desarrollo Urbano y Metropolitano), Mariana Nizzo y algunos más del área.
“Después que el Ejecutivo elevara al Concejo el proyecto de ordenanza sobre el Plan Periurbano Rural noroeste de la ciudad, entonces el CCIRR convocó a una mesa de trabajo en el que se expuso el mismo, que puede ser modificado y no está nada cerrado. La idea es abrir el debate y compartirlo con los interesados para compartir la discusión”, aclaró Soltermam.
Y agregó: “Principalmente, se habló de 1.200 ha que se encuentran al este y al oeste de la variante de la ruta 34. En la actualidad, 170 ha podrían ser industrializadas y ponerse a la venta porque no corren riesgo de inundación. El oeste de nuestra ciudad necesita de obras hídricas, que son muy costosas y tendrán que esperar, para la instalación de empresas. La idea del Ejecutivo es que al oeste de la variante ese sector no se urbanice y se mantenga la ruralidad porque ahí tenemos actividades preexistentes”.
“Es una mesa de trabajo -continuó la legisladora- que continuará, según el pedido de los representantes de la gremial empresaria. Si se gestiona financiamiento para obras de saneamiento y seguir pensando en el crecimiento industrial de la ciudad, podríamos discutir lo que puede suceder con estas 170 ha, que no son inundables y podrían ser utilizadas para suelo industrial. En principio, la idea sería desdoblar la ordenanza con lo posible ahora y con lo que tendría que esperar en un futuro más lejano con obras indicadas especiales para seguir pensando en el crecimiento de la ciudad para más adelante. La cuestión urbanística y la planificación no es rígida, va cambiando permanentemente, tratando paso a paso los avances y disponibilidades de cada sector”.
Mirada opositora
Por su parte, Mársico remarcó que “el planteo del sector empresario y comercial es el avance del proyecto. Están teniendo los reclamos de la gente que tiene comercios y servicios sobre la ruta 34; con la puesta en funcionamiento de la variante van a mermar mucho sus ventas y están preocupados por este motivo”.
Por este motivo, “quieren saber cuándo van a tener un avance para los sectores que irán a aquel lugar y se puedan habilitar. La Municipalidad contesta que hay obras hídricas pendientes, pero hay un sector que sí se puede ocupar. Los empresarios pidieron que se agilicen los trámites para lograr los lugares en condiciones para empezar a instalarse en el nuevo emplazamiento”.
En tanto, Destéfanis dijo que “siguen siendo muchas más las dudas que las certezas. Es un proyecto que le va mucho dinero, con obras de saneamiento para que el agua desagote, con aportes de la Provincia y la Nación, en el contexto de cambios de autoridades por las elecciones, lo que demorará en concretarse en el tiempo. Hay muchos intereses en juego de productores agropecuarios, de los quieren lotear el lugar, el proyecto de Rafaela Alimentos, entre otros”.
Para el concejal, “ojalá lo podamos ver en 15 o 20 años. El intendente Castellano dijo en la presentación del proyecto dijo que es una obra a 50 años, pero se deberá hacerlo por etapas. Hay dudas para cuando se habilite la circunvalación en las próximas semanas; qué pasará con la circulación de los camiones porque saldrán del recorrido actual de la ruta 34. Qué pasará con las gomerías, las estaciones de servicio, los comedores porque todavía no hay una ubicación para los mismos”.
Finalmente, “sigo pensando que fue un manotazo, no sé si de ahogado, después de las elecciones de las PASO (ganó la oposición), cuándo lo presentaron Castellano, Martino y Peiretti en el Salón Verde del Municipio. No fue charlado ni consensuado previamente, de apuro completamente, sin ninguna previsibilidad; sí de parte, a lo mejor, de Mariana Nizzo y Martino, que lo vienen estudiando hace tiempo. Ojalá que en el próximo período de cuatro años, sean los gobiernos a nivel local, provincial y nacional, pueda haber avances con respecto al corrimiento del agua para que vaya para al Bajo Peretti o la parte norte para poder desagotar, que es muy importante hacerlo para el conjunto de la obra”.
El proyecto del “Plan periurbano rural noroeste” ingresó el lunes último a la reunión de comisiones para empezar a ser tratado por los ediles.
Recordemos que este proyecto fue presentado hace tres semanas por el intendente Castellano en el Salón Verde municipal ante distintos actores sociales interesados en el mismo.
Luego los concejales de la oposición aclararon que convocarán al Centro Comercial e Industrial de Rafaela y la Región, a los colegios de arquitectos e ingenieros, a la Sociedad Rural, la Asociación Civil Productores Unidos de Rafaela, entre otros, para que den su punto de vista. Entre los interrogantes a resolver están cómo afectará este proyecto a los comerciantes ubicados en la ruta 34 cuando se habilite la variante y los problemas de anegamientos en el sector noroeste.
