ROMA (ZENIT, 17/072017).- El cardenal Jorge Urosa Savino, arzobispo de Caracas, fue retenido en contra de su voluntad dentro de una iglesia por los “colectivos de Maduro” que asesinaron a una mujer, indicaron diversos medios, entre los cuales Radio Vaticano, que señala lo ocurrido, cuando en Roma el Papa dirigía “un saludo especial a la comunidad venezolana en Italia, renovando la oración por vuestro amado país”.
En Venezuela lo indicó el arzobispo Urosa, tras haber acudido a celebrar la misa con motivo de la festividad de Nuestra Señora del Carmen, cuando al terminar el oficio religioso a las 12:30 horas aproximadamente, junto a más de cuatrocientas personas quedó secuestrado por los colectivos violentos vinculados al Gobierno de Nicolás Maduro.
El arzobispo de Caracas fue elevado a cardenal el 24 de marzo de 2006 en una ceremonia en la Ciudad del Vaticano, formando parte del Colegio Cardenalicio, papable y elector de los cónclaves hasta el cumplimiento de sus 80 años, en agosto de 2022. En Roma tiene a su cargo la iglesia Santa María ai Monti, cercana al Coliseo romano.
El cardenal Urosa, en la oficina de prensa del arzobispado de Caracas, narró la terrible experiencia en una iglesia ubicada al oeste de la capital de Venezuela.
“Cuando terminó la misa, vinieron unos colectivos y dispararon ocasionando varios heridos, y las personas que ahora se encuentran dentro de la iglesia, las cuales eran sometidas bajo asedio”, añadió el purpurado venezolano.
Urosa dejó claro que “la Iglesia Nuestra Señora del Carmen, no tuvo nada que ver con el punto electoral de afuera”.
De hecho en Venezuela se estaba realizando un plebiscito contra la gestión del presidente Nicolás Maduro, quien convocó una constituyente para modificar la Carta magna del país y eternizarse en el poder. La legalidad de la consulta del domingo es cuestionada por el gobierno de Maduro, pero la oposición sacó a más de siete millones de personas a las calles.
El cardenal Urosa añadió que desde las 15:30 que funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana sirvieron de mediadores con los colectivos violentos. El Urosa añadió: “Es importantísimo que se resuelva esta situación porque esto es gravísimo y es un atropello contra ciudadanos indefensos dentro de una iglesia. Es gravísimo”.
La retención de la máxima autoridad religiosa de Caracas concluyó a las 16:30 de la tarde, aproximadamente, tiempo en el que también comenzaron a salir del templo las demás personas.
En la Plaza de San Pedro, Radio Vaticano entrevistó a Assunta Maria Di Pino, dell’Associazione Latino-Americana Italia (ALI), quien dijo que “para el pueblo venezolano fue una gran emoción, porque ha dado un saludo y una esperanza espontánea, al rezar por Venezuela”. Y que el voto del domingo fue “un decir basta”. Porque aseguró, “el pueblo de venezolano quiere un cambio inmediato, quiere votaciones”.