Eva Perón, el peronismo
No hay sueños porque el futuro no es Tecnópolis. El amor nunca envejece, y mucho más si acaricia y penetra donde hay rechazo, y en la Argentina de aquél peronismo había mucha gente rechazada; en la Argentina de hoy, también. Para buscar la felicidad del pueblo sólo hay que volver a ser tan transgresores como Perón y Evita: amar a los pobres.
Por María Herminia Grande (Rosario)