Por Alejo Miranda.- Hay 23 nombres (entre ellos el rafaelino Mayco Vivas) que quedarán grabados para siempre en algún lugar del corazón de todos los argentinos. Se podría agregar al staff y hasta el resto de los 45 jugadores del plantel. Aunque es injusto no darle crédito a todo el rugby nacional. La largamente esperada primera victoria en la historia ante Nueva Zelanda llegó en el momento menos pensado, lo que en definitiva refleja la esencia de los Pumas.
Sobreponerse a la adversidad es la marca registrada del seleccionado argentino de rugby, un equipo que se hizo un lugar entre las potencias a fuerza de dar siempre un poco más del 100%. Un recorrido signado por la épica desde aquella primera victoria en Ellis Park ante Junior Springboks en 1965, cuando según la leyenda un periodista sudafricano simplificó el yaguareté que adornaba el pecho y los bautizó Pumas, que así despertaron la atención del planeta ovalado.
Hoy, el rugby argentino tiene recursos como nunca para pelear en similares condiciones ante cualquiera: una competencia anual con las potencias y una base amplia de jugadores profesionales, ya sea que actúen en los clubes principales de Europa o hayan hecho todo el recorrido en el Super Rugby con Jaguares. Paradójicamente (o no), el primer triunfo ante Nueva Zelanda en 34 partidos se alcanzó justo cuando todo ese bagaje quedó relativizado por la pandemia. Jugadores entrenándose en departamentos, pasando por varias cuarentenas, contagios de covid que pusieron en jaque la participación y ensayando en conjunto recién diez días antes del Test Match. Y contra un adversario cuyos jugadores tuvieron actividad normal a lo largo del año (en Nueva Zelanda casi no hubo coronavirus) y venía de jugar cuatro Test Matches ante Australia.
También es relevante que el triunfo haya sido el primer partido de un nuevo ciclo luego del conflictuado Mundial de Japón, donde no hubo comunión entre los jugadores ni entre ellos y el staff. Pero Mario Ledesma aceptó sus errores y puso el foco en el futuro. Un ejemplo: Nicolás Sánchez dijo tras el partido que pensó que el encuentro ante Estados Unidos en Saitama había sido su último con la celeste y blanca. Lo que haya ocurrido entre él y el entrenador quedó atrás, y en el Bankwest Stadium de Sydney el apertura tucumano, el goleador histórico de los Pumas, fue la figura.
Sánchez superó la marca de 21 puntos que poseía Hugo Porta como máximo anotador ante los All Blacks. Fue en el 21-21 en Ferro en 1985, el mejor resultado de los Pumas hasta aquí ante los neozelandeses, donde incluso tuvieron un scrum a cinco yardas en la última jugada que terminó con knock-on del Flaco Ernesto Ure. Muchas otras veces se estuvo cerca.
La más recordada es la derrota de 2001 en River. Los Pumas ganaban 20-17 con el tiempo cumplido, pero un despeje de Felipe Contepomi quedó adentro y de contra facturó Scott Robertson para el 24-20 final. Cinco años más tarde, en Vélez, los Pumas estuvieron más de dos minutos insistiendo a centímetros del in-goal, pero no pudieron quebrar la defensa del visitante, que se impuso 25-19. La última fue en el enfrentamiento previo, el año pasado también en el Amalfitani. Dos semanas después de haber llegado a la final del Super Rugby, los Pumas tuvieron un line-out en cinco yardas, pero la defensa del maul fue efectiva y Nueva Zelanda ganó 20-16.
Con este triunfo en Parramatta, el barrio al noroeste de Sydney donde los All Blacks hicieron de locales, la Argentina se sacó el estigma y ahora acumula victorias ante todas las potencias. La primera en este nivel, vale recordar, fue en 1979 ante Australia, 24-13 en Ferro. Otros hitos salientes fueron el triunfo 25-18 ante Inglaterra en Twickenham de 2006, el 17-12 a Francia en el Stade de France de París por el partido inaugural del Mundial 2007 o el primero oficial ante Sudáfrica, 37-25 en Durban en 2015 con los Pumas originales del 65 en las tribunas.
Los Pumas ya no tienen cuentas pendientes ante ningún seleccionado nacional poderoso. Al único país al que no le ganaron de los que enfrentaron es a Zimbabwe, que en el único choque se impuso 17-12 en aquella gira del 65, cuando todavía era Rhodesia del Sur. También tienen en el tintero vencer a los British & Irish Lions. Detalles menores, a la par de lo que significa vencer a lo grandes.
En un año en que no hubo rugby en la Argentina, en que los Jaguares se quedaron sin destino ante la desaparición del Super Rugby y se produjo un éxodo de jugadores a Europa, en que el Rugby Championship estuvo a punto de no jugarse (al punto que Sudáfrica se bajó y pasó a llamarse Tri-Nations), en el que hubo que sortear incontables escollos en la preparación, los Pumas alcanzaron uno de los triunfos más salientes en toda su historia. En un año en que todo fue adversidad, los Pumas revelaron su esencia.
Fuente: https://www.lanacion.com.ar/, 15 de noviembre de 2020.