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Recordando los picnics del estudiante en el Aero Club de Rafaela

«Un año fue impresionante porque hubo unas 20.000 personas, vinieron ómnibus de todos lados», destaca Lolo Bauducco. Tiene 81 años y sigue haciendo radio con la pasión de siempre: en 2020 cumple 50 años de trayectoria. Animó con música en Totem y en Independiente. Fue concejal y funcionario municipal.
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Lolo Bauducco en el estudio de su radio.

Por Emilio Grande (h.). Hablar del Día de la Primavera y del Día del Estudiante está asociado a Félix «Lolo» Bauducco. Los más jóvenes se preguntarán ¿por qué? Porque el Lolo marcó una época gloriosa de la noche rafaelina poniendo música, una voz inconfundible en la radiofonía local y animador de los picnic durante años: desde 1978 hasta mediados de la década 80 en el Aero Club Rafaela, en el 84 por lluvia se hizo en el Club Independiente y al año siguiente en el Club Ferro.
«En aquellos tiempos tenía Totem (bulevar Santa Fe y San Lorenzo), que fue uno de los primeros boliches bailables, el primero había sido El Ciervo, que estaba fuera de la ciudad, hoy está dentro (del ejido urbano). En esa época empezó LT28 Radio Rafaela donde trabajaba, surgió hacer el picnic del estudiante, pedí permiso en el Aero Club, me lo dieron y era con entrada gratis. El concesionario nos pagaba porque había que hacer la instalación de columnas enormes y el tendido de cables en todo el predio», recuerda con emoción en una entrevista con este cronista, quien también vivió aquella época durante su juventud.
Sus colaboradores más cercanos fueron Pablo Paravano, Willy Giussani, los hermanos Guillermo y Daniel Spilotti, Mario Astesano, el Pianta Platini, entre otros, quienes fueron recordados con la ayuda de Fernanda, una de las hijas del Lolo presentes en la conversación.
Y agrega: «me contrataban para conducir el fogón de la UTN en la Rural en la noche del día 20 de setiembre, después de ahí los jóvenes se iban a bailar a El Ciervo y cuando terminaba muchos iban al Aero Club, algunos chupados se dormían al pie de los árboles. Y Paravano renegaba porque necesitaba ese lugar para poner los bafles; llevaba dos camionetas con los equipos una vez que terminaba en la Rural para empezar al armado en el Aero, así que no dormía».
Bauducco nació hace 81 años en Humberto I, animaba a «cappella» las celebraciones festivas en la escuela, vino a Rafaela cuando tenía 15 años. El 7 de julio de 1970 se sumó a la flamante LT28 con el programa «Mi ciudad, sus estilos, la noche y usted» durante la mañana, «Con todo ritmo» también a la mañana, después el recordado «Tomando sol, las antisiestas» y en invierno «Por favor todos», y por la tarde «Pero con música, valses y algo más». Hace más de 10 años que tiene su propia radio, FM 106,7 conduciendo 2 programas: «Por favor todos» de 10 a 12 y de 17 a 19 horas. Además de Totem, animó los bailes en el Club Independiente. También fue concejal durante varios períodos desde 1999 hasta 2013 y funcionario municipal en la gestión del intendente Omar Perotti, recibiendo los reclamos de la gente.
¿Estos picnics marcaron una época?
Arrancaba a la mañana y duraba hasta la tardecita, los chicos se podían llevar bebidas y comidas, además estaba el servicio gastronómico del concesionario. Yo salía en vivo en la radio y ganaba con la publicidad de los comercios, especialmente de ropa. Recuerdo que un año, no me acuerdo cuál, fue impresionante porque hubo unas 20.000 personas, vinieron ómnibus de todos lados: Entre Ríos, Selva (Santiago del Estero), San Lorenzo, San Francisco, Río Segundo, Río Tercero, Morteros, entre otros, que se ubicaban desde la cruz en avenida Luis Fanti-ruta 34 en la banquina de la ruta hasta el Aero Club y pasaba del otro lado.

¿Cuáles fueron los secretos de tanto éxito?
Primeramente por la música, que me conocían por la popularidad en LT28 que llegaba muy lejos; es algo que sigo haciendo, me llaman por teléfono, me piden música y los complazco inmediatamente. En el picnic se bailaba en la pista pegada al comedor y en todos lados; me pedían música alegre, rock, lentos, folklore. Una vez tuve que decir que no bailen en las pistas de aviación.
¿Por qué no tuvo continuidad?
Cuando nuevamente pedí el permiso en el Aero Club en 1985, no quería la comisión porque se fue haciendo más grande y había abuelos, y así fue su fin.
Pasaron 40 años, ¿qué recuerdos y sentimientos te producen?
Hay tanta diferencia con la actualidad, gracias a Dios no teníamos droga en aquel entonces y solamente alcohol, había algún mamado pero estaba la Policía que colaboraba; también la Municipalidad para organizar el tránsito en la ruta porque era un montón de gente, ya que era gratis para la juventud. En aquel entonces hablaba con el intendente Juan Carlos Borio y Luis Mársico (fue secretario de Hacienda y de Gobierno, padre del concejal Lisandro), proponiéndoles que el picnic del estudiante sea nacional debido a la cantidad de gente y la fama que había tomado; recuerdo que me vinieron a hacer notas radios de Santa Fe y Rosario.
Pasaron cuatro décadas, ¿cómo analizas los cambios en la juventud y en la sociedad?
Cada vez me convenzo que es una cuestión de educación en todo el sentido de la palabra, no confundamos aprendizaje, sapiencia y conocimiento con educación porque se ha perdido el respeto, la sinceridad, da lo mismo como dice el tango, hay cosas que me avergüenzan. Recuerdo que hayamos elegido un Presidente que dijera que «si yo les decía lo que iba a hacer, no me votaba nadie, que vamos a llegar a la estratosfera y en una hora y media a Japón», otro Presidente que diga que hay menos pobreza que en Alemania», otro Presidente que prometiera «pobreza cero» y estamos cada vez peor. Desde que yo me acuerdo esto va de mal en peor. No estoy hablando de un partido político, yo miro como argentino, me trajeron al mundo en 1938.
En 2020 vas a cumplir 50 años haciendo radio, ¿seguís con la misma pasión, fuerzas y ganas?
Tal vez más ganas, la cantidad de llamados que tengo, unos 30 por día, porque la gente que me pide temas. El programa de la mañana empieza siempre con un chamamé.
Viviste los cambios tecnológicos del disco «long play», pasando por el CD a la música por internet, ¿cómo fue la adaptación?
Me fui adaptando, tengo 4 máquinas (computadoras) para hacer esto, cambiando, escuchamos toda la música y la que quieras. Trato de hablar lo menos posible de política por la grieta, pero hay momentos que no puedo dejar de hablar, tengo que decir algo que me sale de adentro, porque no soy falso; hay momentos que uno tiene que explotar y decís no puede ser. Yo no puedo vivir con el «Gordo» Valor al lado mío, es algo instintivo. Roguemos y ojalá hoy tengan quienes están allá muy alto algún signo de desprendimiento correcto por el bien de todos. Si estuviera frente a Macri le diría «yo te voté, decile que no querés ser presidente, que todo el mundo vote al que tiene menos votos en la tercera posición, es un tipo que sabe, no defiende a nadie, me refiero a Lavagna». Nos haría muy bien a los argentinos y sería la única forma de no ir a ninguna punta de la grieta.

Fuente: diario Castellanos, Rafaela, 21 de setiembre de 2019.

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