Por Emilio Grande (h.).- Después de 10 años, finalmente el 28 de noviembre fue inaugurado el moderno Hospital Regional “Dr. Jaime Ferré” de alta complejidad para Rafaela y la región, ubicado en Bv. Lehmann 2800, al norte de nuestra ciudad.
Se trata de una política de Estado ideada por el gobernador Hermes Binner en 2008 y en 2015 fue empezada la construcción durante las gobernaciones de Antonio Bonfatti y Miguel Lifschitz, continuada por Omar Perotti y concluida por Maximiliano Pullaro.
El nuevo Hospital, con 21.730 m², tecnología de última generación y capacidad para fortalecer la red sanitaria regional, se convierte en un efector clave para responder a las necesidades de un territorio en crecimiento, fortalece la red sanitaria regional con el acceso a servicios de alta complejidad para más de 460 mil santafesinos. La inversión en obras y equipamiento superó los $66.000 millones para brindar una atención de mayor complejidad.
Cuenta con cuatro bloques por piso, con planta baja, entrepiso técnico y dos pisos superiores. Presenta doble ingreso -público y de emergencias-, y doble circulación para público y personal médico, lo que refuerza la eficiencia y seguridad operativa que distingue a todo el proyecto.
Los patios interiores garantizan ventilación e iluminación natural; las salas de espera son amplias y accesibles, como también los espacios para familiares y las salas de informes privados, entre otras características arquitectónicas. Hay una residencia para madres de otras localidades, que permitirá brindar alojamiento para estar cerca de los niños que transitan una internación.
El nuevo efector es el único hospital de alta complejidad en las regiones de Salud Nodo Rafaela y Nodo Ceres. Cuenta con más de 170 camas totales, distribuidas entre Maternidad, Neonatología, Guardia Pediátrica y de Adultos, Internación general y Cuidados Críticos, tanto para adultos como para pacientes pediátricos.
Este hospital tiene el único resonador magnético nuclear del sector público en la región, además de un tomógrafo, un nuevo equipo de mamografía, siete ecógrafos y dos equipos de Rayos X digital directo.
El complejo quirúrgico duplica la capacidad actual, con camillas electrohidráulicas y kits para múltiples especialidades. Suma una segunda torre de cirugía laparoscópica y un electrobisturí de argón, que optimiza la precisión y seguridad en procedimientos complejos. Esta ampliación permite reducir en un 50% la lista de espera quirúrgica en la región.
Las áreas de internación responden a un modelo de cuidados progresivos, que contempla áreas dedicadas para la atención integral de pacientes de salud mental. Incorporan camas adaptadas para personas con obesidad mórbida y espacios preparados para internación conjunta madre-hijo. La Unidad de Cuidados Críticos dispone de camas con respiradores y monitores conectados a una central de vigilancia en el office de enfermería para una atención inmediata ante cualquier cambio clínico.
En el edificio actual de calle Lisandro de la Torre 737 continúan funcionando los consultorios ambulatorios de las especialidades que tiene actualmente el SAMCO, vacunatorio, enfermería, salud mental, trabajo social, farmacia, Rayos X y ecografía, entre otras prestaciones, para garantizar la accesibilidad en el sector oeste de la ciudad.
No todo es color de rosas en el nuevo edificio. Después de la última lluvia, en un sector de la parte de atrás donde ingresan los médicos apareció un charco de agua y un manchón de humedad en el techo, tuvieron que hacer un boquete para que drenara el agua acumulada. Otro desafío por resolver es la incorporación de nuevos profesionales para la tecnología de alta complejidad.
Para entender el presente hay que remontarse al pasado con el Hospital de la Caridad fundado el 4 de junio de 1905, siendo el primer director el doctor Jaime Ferré, promovido por la Sociedad de Beneficencia el 17 de agosto de 1902. Cuidemos entre todos la flamante obra edilicia y la tecnología invertida para el bien de los rafaelinos y de los habitantes de la región.
