Por Emilio Grande (h.).- En dos oportunidades no hubo quorum para abordar el proyecto de “ficha limpia” en la Cámara de Diputados, pero no ocurre lo mismo cuando tienen que tratar sus privilegios como aumentarse las abultadas dietas. El objetivo del proyecto era que personas condenadas por corrupción en segunda instancia no puedan participar en las elecciones.
El presidente Milei hizo campaña contra la “casta política” para desterrar los viejos hábitos de la dirigencia, pero en los últimos días se conoció que el operador gubernamental Santiago Caputo acordó con el kirchnerismo para que no se tratase el proyecto de “ficha limpia” en la Cámara Baja, con deserciones políticas de 13 diputados, de los cuales 8 fueron de La Libertad Avanza y dos diputados del PRO, que responden a Patricia Bullrich.
Fue el oficialismo el responsable para que no hubiese sesión de los diputados para establecer un sistema que habría hecho imposible que los políticos corruptos se protegieran en los fueros parlamentarios. Si avanzaba este proyecto de ley, la más afectada hubiera sido Cristina Fernández de Kirchner (no es la única), quien tiene varias causas judiciales, recientemente confirmada la condena por la Cámara Federal de Casación Penal en el caso Vialidad a seis años de prisión y la inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos, pero todavía puede presentarse a elecciones en 2025 hasta que se expida la Corte.
Dos días antes de la sesión en Diputados, Cristina le envió un mensaje político a Milei al autorizar a la senadora Lucía Corpacci a firmar el dictamen de la Comisión de Acuerdos en favor del juez Ariel Lijo como miembro de la Corte.
La diputada nacional Silvia Lospennato, que lucha desde 2016 por una ley de “ficha limpia”, se lamentó al decir que “no puedo salir de mi asombro. 133 diputados comprometieron su asistencia hasta poco antes de la sesión para votar el proyecto de ficha limpia y estuvieron solo 116. Las ocho ausencias de La Libertad Avanza fueron decisivas para el fracaso”, según publicó Joaquín Morales Solá.
El proyecto, inicialmente de Lospennato, lo terminaron firmando dos diputados oficialistas: Nicolás Mayoraz, presidente de la Comisión de Asuntos Constitucionales, y Manuel Quintar, titular de la Comisión de Justicia de la Cámara baja, quienes fueron más restrictivos en los alcances de la “ficha limpia”, estableciendo que solo afectaría a los políticos con condena en dos instancias de la Justicia y no en una sola, y limitaba sus alcances solamente al delito de corrupción. Fue el mileísmo el que tranquilizó el futuro electoral de Cristina Kirchner. Estaba en juego una negociación, incluida la reelección de Martín Menem como presidente de la Cámara de Diputados.
La Asociación Empresaria Argentina (AEA), que nuclea a los dueños de las grandes empresas, IDEA, la Cámara de Comercio y la Cámara de Comercio de Estados Unidos en la Argentina, hicieron pública su preocupación por la falta de quorum parlamentario para sancionar la corrupción.
En la misma línea, la Asociación Cristiana de Dirigentes de Empresa (ACDE) emitió un comunicado, exhortando a los diputados nacionales a que traten y sancionen el proyecto de ley denominado “ficha limpia”, que viene siendo impulsado, desde hace varios años, por la sociedad civil como una forma de moralizar la acción política.
El ex presidente Mauricio Macri opinó que “con dirigentes corruptos no hay futuro”, poniendo en riesgo la alianza electoral del PRO con La Libertad Avanza para las elecciones del 2025.
Finalmente, Milei tomó nota del malhumor social con la caída del tratamiento de “ficha limpia” al prometer que presentará otro proyecto, designando al abogado Alejandro Fargosi como representante del Gobierno en la confección de un nuevo texto.
Negociar y pactar es parte del juego político, siempre y cuando se busque el bien común por encima de los intereses personales o particulares, pero nunca se debe tranzar con los corruptos y los que priorizan la cultura de la muerte… ¿Para qué se acercó el Gobierno al kirchnerismo? ¿Será para que vote el acuerdo del cuestionado juez Lijo como miembro de la Corte Suprema?