La política es indispensable en la vida social. Los hombres y mujeres de empresa cristianos nucleados en ACDE creemos que la acción de quienes dirigen la cosa pública en la búsqueda de lograr el bien común es “una forma eminente de la caridad”. Es, en sí misma, una forma de entrega. Es dejar de lado el egoísmo de la búsqueda de lo individual, para abrazar lo colectivo.
Por ello, es indispensable que quienes gobiernan en nuestro nombre y representación, gocen de la más alta estima social. Cualquier duda sobre la honestidad u honorabilidad de los funcionarios genera daños irreparables al sistema. Genera, en la conciencia del ciudadano, la sensación de que sectores de la dirigencia de nuestro país sólo buscan el poder o beneficio personal.
Por ello, exhortamos a los diputados nacionales a que traten y sancionen el proyecto de ley denominado “Ficha limpia”, que viene siendo impulsado, desde hace varios años, por la sociedad civil como una forma de moralizar la acción política.
Como elemento fundamental para la convivencia pacífica y el desarrollo económico es necesario que nuestro país fortalezca sus instituciones a través de los valores éticos y morales que deben regir la acción de toda la dirigencia de nuestro país, conforme nos enseñara nuestro fundador el empresario argentino Enrique Shaw.