A través de varios proyectos de comunicación el diputado Juan Argañaraz presentó pedidos para que el Gobierno Nacional tome medidas de fondo para los créditos UVA. El legislador de Vida y Familia solicitó en la Cámara de Diputados de Santa Fe una nueva extensión del congelamiento de los créditos hipotecarios, prendarios y personales UVA, así como también una nueva fórmula de actualización de las cuotas basada en la evolución de los salarios y así ser equitativos con los mismos.
El 31 de enero venció el plazo del decreto nacional que congeló las cuotas que pagan los deudores de los créditos hipotecarios, prendarios y personales UVA, en este sentido el Diputado rafaelino Juan Argañaraz expresó “en estos días se está dando las primeras ejecuciones de hipotecas UVA en San Rafael (Mendoza) y Villa María (Córdoba) y el Gobierno Nacional no tomó ninguna medida de fondo respecto a la movilidad de este sistema que termina siendo usurero para los adquisidores”. Alrededor de 110.000 familias tomaron créditos hipotecarios UVA con la promesa de poder cumplir el sueño de la casa propia o inversión familiar y fueron estafados.
Argañaraz dimensionó en términos reales la situación que viven los tomadores de créditos UVA, “alguien que obtuvo un crédito hipotecario en enero de 2017 por $2 millones, comenzó con una cuota de $9.000 y actualmente paga una cuota de $45.000, en tanto el capital adeudado pasó de 2 millones a 9 millones de pesos como es el caso del mendocino Marcelo Macaluso, sin dudas son montos muy difíciles de afrontar para los trabajadores”. Y añadió “Con el descongelamiento de las cuotas, que empezó a regir el 31 de enero, se van a presentar muchísimos casos más como pasó en el 2001, que en ese momento eran créditos tomados en dólares. De hecho, en el grupo de autoconvocados, hay familias que están pagando entre $70.000 y $80.000 por mes.”
Los créditos hipotecarios UVA surgieron en 2016, durante el Gobierno de Mauricio Macri, como una opción que permitía a más familias acceder a su vivienda propia porque requería de ingresos más bajos que un crédito tradicional. Pero a partir de 2018, los deudores de esos nuevos préstamos se vieron afectados por la indexación de las cuotas al ritmo de la inflación, lo mismo ocurrió con los créditos prendarios UVA vinculados a la compra de automóviles. Los préstamos UVA son en pesos a tasa fija, ajustable por el Coeficiente de Estabilización de Referencia (CER) que refleja la inflación del Índice de Precios al Consumidor y que está expresado en Unidades de Valor Adquisitivo (UVA). En marzo de 2016, las UVA comenzaron con un valor de $14,05, que equivalía al costo promedio de construcción de un metro cuadrado dividido por 1.000. Actualmente su valor es de $74 este incremento no solo se trasladó a las cuotas del crédito, sino también al monto nominal del capital adeudado.