El queso, producto indisolublemente ligado al hombre y su cultura, se vincula al intelecto y los sentidos y requiere indispensablemente del saber y el paso del tiempo. Si bien estos atributos están instalados en el imaginario colectivo, no tenían una fuerte presencia en la imagen de marca de ilolay, más cercana a lo natural, la frescura, el campo, el sol y la inocencia.
Se planteó cómo lograr que la percepción de marca y la realidad del producto armonizaran y se partió de la idea de darle el gusto al intelecto y los sentidos.
Para que el intelecto tenga plena satisfacción, se recurrió a la tradición europea basada en el árbol familiar y en el sueño de Josef Marie Williner, quien al llegar de su Suiza natal, dio el primer impulso para que esto fuera posible. A ello se sumó la calidad total argentina, la vocación por la perfección que siempre caracterizó a la empresa y le permitió certificar todos los procesos desde el tambo hasta la góndola.
Se intentó reflejar estos conceptos a través de una imagen que habla por sí misma, con un fuerte carácter que se refleja en el personaje, su ámbito, el cromático y los valores tipográficos.
Así nace la nueva imagen de quesos ilolay:
Queso untables ilolay presenta su nueva línea de sabores gourmet “una colección de pequeños placeres”.
Con el fin de ampliar su oferta de quesos untables y brindar al consumidor una nueva línea de sabores diferentes y exóticos, Sucesores de Alfredo Williner SA lanzó al mercado los nuevos quesos untables con sabores gourmet.
Para los consumidores innovadores, con paladares refinados y que valoran el placer del buen comer, tres nuevas propuestas de quesos untables ilolay, en atractivos y coloridos potes de 100gr, con tres deliciosos sabores: con ciervo ahumado, salmón rosado y finas hierbas.
* Ciervo ahumado: con un excelente aroma y sabor este queso untable ilolay contiene exclusivos cortes de ciervos provenientes de criaderos avalados por los más estrictos controles de calidad.
* Salmón rosado: conquista con su textura, delicado aroma, color atrapante y sabor inolvidable del salmón, proveniente también de criaderos avalados por exigentes normas de calidad.
* Finas hierbas: perfecta combinación de diferentes hierbas: Ciboulette, Albahaca, Romero, Eneldo, Savia, Perejil y Orégano, que son cultivadas al pie de la cordillera de los Andes, región que por sus características elevan su fragancia.
Los quesos ilolay, que cuentan con el respaldo de Williner, sinónimo de tradición europea y calidad total argentina, son siempre una excelente opción para degustar en todo momento.
Williner: historia quesera
En 1877, José María Williner parte de su ciudad natal Grachen, cantón de Valeis, Suiza; con el afán de hacer realidad su sueño “producir los mejores y más exquisitos quesos de la Argentina”.
El punto de partida fue incursionar en la actividad ganadera, trabajando con esfuerzo y pasión, lo cual le permite llegar a tener 14 tambos en nuestra actual zona productora y elaboradora.
Años más tarde su primogénito Alfredo, impulsado por la energía y decisión de dar cumplimiento al sueño de su padre, sería quien concretaría su anhelo lanzando distintas variedades de pastas blandas y semiduras -donde no podía faltar el gruyere, queso emblemático de la Suiza natal- comenzando a lograr la aceptación del consumidor argentino.
Entre los importantes hitos de la evolución quesera de la empresa se encuentra la adquisición de la prestigiosa fábrica de quesos “De Lorenzi” a fines de la década del 70. Los logros alcanzados por esta empresa trascendieron las fronteras del país y obtuvieron el reconocimiento de jurados internacionales, particularmente con la variedad Trebolgiano, un queso de grana, con prolongadísimo estacionamiento, que ha cautivado durante casi un siglo a consumidores de todo el mundo por su fino aroma y exquisito sabor.
El siglo XXI encuentra a la línea de quesos ilolay incorporando nuevos tipos y sabores a las más de 20 variedades elaboradas en sus cinco plantas fabriles.
En el plano internacional, la empresa ha logrado experiencia y trayectoria notables, que se reflejan en el hecho de ser uno de los dos mayores exportadores de quesos duros en hormas a EE.UU., país al que exporta desde hace aproximadamente 20 años. También comercializa quesos Mozzarrella y Gouda a más de 15 países, entre los que se destacan Corea, Taiwán y Japón.
Un pilar fundamental del crecimiento de la imagen de ilolay lo constituye la innovación. Claros ejemplos que plasman con contenido graso de sólo 6%, queso con agregado de fibra y bioqueso, un queso con probióticos, ambos únicos en su tipo en el mercado. Por último, cabe mencionar que entre los quesos que ilolay ofrece, dos tipos cuentan con denominación de origen: el queso fresco San Jorge y el de grana Trebolgiano.
Manteniendo con rigurosidad los principios de tradición europea y calidad total argentina instalados por su creador, los quesos ilolay han logrado un lugar destacado, tanto en el mercado local como en el internacional.