Terminaron obras de efluentes en Rafaela Alimentos

Se trata del editorial del programa “Sábado 100” que se emite por radio Mitre Rafaela (FM 91,9), que conduce Emilio Grande (h.). Se suma a las obras terminadas en Molfino y Sodecar. Así empieza a saldarse un pasivo ambiental de más de 30 años.

Finalmente hace unos días finalizaron los trabajos del tratamiento secundario en Rafaela Alimentos después de más de dos años de construcción cuyas demoras se debieron a problemas climáticos y económicos por la situación delicada de esta empresa, cuya planta está en calle Perú al oeste de la empresa frigorífica ubicada en el corazón del barrio 9 de Julio. La inversión realizada por el ex frigorífico Fasoli fue de 1.350.000 pesos.
Se trata de la tercera firma que por más de 30 años contaminó el medio ambiente, especialmente a los canales y arroyos Cañada de Flesia, Las Prusianas y Cululú y el río Salado, ubicados al Este de nuestra ciudad. Las otras dos empresas que hace unos meses completaron sus obras de tratamiento son Molfino y Sodecar.
Así Rafaela empieza a saldar un pasivo medioambiental que produjo problemas de mortandad de vida ictícola, como así también la contaminación de napas freáticas en sus distintos niveles subterráneos.
A decir verdad, estos trabajos realizados fueron posible gracias a la comisión de seguimiento que estuvo integrada por técnicos de la Secretaría de Medio Ambiente de la provincia de Santa Fe, representantes de las comunas de Felicia, Humboldt, Pilar, Nuevo Torino, concejales de la ciudad, miembros de las comisiones vecinales de los barrios 9 de Julio, Luis Fasoli, Guillermo Lehmann, de la Asociación Amigos de la Vida, del club Caza y Pesca El Zar de Humboldt, funcionarios municipales, entre otros.
¿Se hubieran hecho lo mismo estas obras sin la participación directa de esta comisión de seguimiento? ¿Cuál será el futuro de esta comisión de seguimiento? ¿Habrá llegado a su fin luego de su protagonismo en la concreción del objetivo de controlar las obras o podrá seguir funcionando como un foro regional para seguir planteando nuevos proyectos?
No hay que olvidar que las comunas afectadas habían peticionado ante la Defensoría del Pueblo por falta de respuesta gubernamental. Justamente la Defensoría convocó en abril de 2003 a una reunión en Nuevo Torino. Ese fue el puntapié inicial para que a partir de ese momento la comisión formada exigiera a la Secretaría de Medio Ambiente y a las empresas Sodecar, Molfino y Rafaela Alimentos un cronograma de obras inicialmente de 24 meses, pero después las condiciones climáticas y económicas fueron fijando las pautas de trabajo.
Un dicho popular dice que “no hay mal que por bien no venga”. Es una buena noticia que se hayan terminado las obras de tratamiento, pero hay que estar alertas ante nuevas situaciones de contaminación del medio ambiente.

Emilio Grande (h.)

Archivos
Páginas
Scroll al inicio