Alberto Fernández dio un ramplón discurso de campaña que intentó lo imposible: mostrarse como un hombre moderado y, al mismo tiempo, como un fiel discípulo de Cristina Kirchner.
Se trata de un proyecto orientado a múltiples actividades, con un amplio sector para desarrollo de espacios verdes y loteos para viviendas y servicios, según lo anunciado por el presidente Fontanini. Interrogantes para su concreción…
El Intendente habló durante 38 minutos, destacando las obras más importantes para la ciudad. Los ediles oficialistas valoraron la gestión y los desafíos para el futuro. Los opositores criticaron la falta de un plan en seguridad y el agotamiento de un proyecto político.
