Esa obsesión por dividir y fracturar
La Argentina de hoy es mejor en muchos aspectos, pero no tiene la pujanza económica de entonces ni el optimismo social de hace un siglo. No es cierto que éste sea el mejor momento democrático que la Argentina haya vivido nunca, como aseguró la Presidenta, siempre autorreferencial.
Por Joaquín Morales Solá (Buenos Aires)