80 años del adoquinado: ¿tapar o preservar?
Después de ocho décadas fue más resistente que las calles con asfalto o pavimento. El día en que la terminal de ómnibus no esté más en el centro de la ciudad se aliviarán las calles adoquinadas. En Rafaela y en el país ya se derrumbaron edificios históricos; todavía estamos a tiempo de evitarlo porque es más barato y dura más tiempo que hormigonar o asfaltar las calles.
Por Emilio Grande (h.)